Copio integramente este post 
extraído del magnífico blog cultural de Javier Peláez "La Aldea 
Irreductible". Hace ya mucho tiempo que lo publiqué en Acordes y Desacuerdos después de que me diera permiso, y hoy quería compartirlo con los lectores de Mente enjambre.
Este divulgador cultural nos desvela a una curiosidad histórica y musical repleta de sorpresas; una cadena de hechos inesperados que ponen en juego los beneficios económicos generados por el bolero más famoso del mundo, casi nada. Además amantes de las performances tendréis el placer de deleitaros con Jacques Villeret, un maestro.
Esta mañana me llega a mi lector de Feeds, via Blog  de Cine, un corto dirigido por Patrice Leconte y protagonizado por  el genial Jacques Villeret (de la Cena de los idiotas) titulado: El tamborilero del Bolero...
Una
  delicia que he disfrutado durante los ocho minutos que dura el Bolero y
  que sólamente muestra la monótona intervención de Villeret a la  
percusión.
Un corto que aparentemente dice poco, pero que  encierra muchas metáforas  en lo que dura la pieza y que me ha encantado.
Asi que aprovecho  este corto francés para recapitular y recordar algunas anécdotas y  datos curiosos sobre el archiconocido Bolero  de Ravel, que quizá algunos lectores de la Aldea desconozcan...
En
  primer lugar y retomando el corto del Tamborilero del Bolero, hay que 
 decir que ocurre algo curioso con esta pieza... Tras acabar un 
concierto  de violín, el director felicita al primer violín... Tras 
acabar un  concierto para piano y orquesta, el director felicita al 
pianista... Sin  embargo, cuando la música del Bolero termina y 
comienzan los aplausos  del público... El director se acerca al 
percusionista y lo felicita...
La  labor del percusionista es en esta pieza es fundamental. El Bolero se desarrolla con un ritmo y un  tempo invariables...
 Toda la orquesta construye la melodía  (también repetitiva) alrededor 
del compas marcado por el percusionista  que durante toda la pieza, 
siempre realiza la misma tarea.
Su  trabajo es 
organizar las melodías que las cuerdas o los metales van  
construyendo... No puede adelantarse, no puede atrasarse, es siempre la 
 misma repetición durante los ocho minutos que dura el Bolero y de su  
repetitivo ritmo depende la obra entera...
Un ostinato repetido 169 veces, sin  alteraciones ni equivocaciones...  Un trabajo de relojero que al  finalizar la obra, merece la felicitación por parte del Director.
El
  Bolero, sin embargo, no fue para Ravel más que un divertimento... El  
siempre lo consideró como una simple orquestación a modo de experimento.
  Por ello fue el primer sorprendido por su increible éxito, tras su  
estreno en Paris en 1928.
Una pieza tremendamente 
popular que  hasta hace bien poco era la Primera clasificada en el 
Ranking Mundial de  Derechos de Autor en Francia... En España tenemos 
también tenemos  nuestro ejemplo particular con el Concierto de Aranjuez
 del Maestro  Joaquin Rodrigo.
Pero en el caso del Bolero el tema de los  derechos de autor han llegado casi al absurdo.
 Un manuscrito a bolígrafo
 de Maurice  Ravel es el desencadenante de una sucesión de copyrights 
que llega al  surrealismo y que el Estado Francés ha decidido finalizar 
con la  adquisición por 1,8 Millones de Francos... Actualmente la 
Biblioteca  Nacional de Francia es la depositaria.
Un manuscrito a bolígrafo
 de Maurice  Ravel es el desencadenante de una sucesión de copyrights 
que llega al  surrealismo y que el Estado Francés ha decidido finalizar 
con la  adquisición por 1,8 Millones de Francos... Actualmente la 
Biblioteca  Nacional de Francia es la depositaria.
Maurice Ravel murió en 1937 sin haber tenido hijos, por lo  que los derechos del Bolero pasaron a  manos de su hermano Eduard Ravel que, sin embargo, no los pudo  disfrutar con mucha salud puesto que en 1954  tuvo un accidente de coche, junto con su esposa, y quedó  bastante malparado...
Por este  accidente, se hizo necesaria la contratación de una enfermera, Jeanne Tavernne, que llegó acompañada  de su marido, Alexandre Tavernne,  un barbero que se dispuso a hacer funciones de chofer para la familia  Ravel.
Eduard
 se fue recuperando y los ingresos por las  composiciones de su hermano 
le estaban generando millones, asi que, en  un arrebato de patriotismo 
declaró que tras su muerte donaría el 80% de  los derechos de autor a la
 Ciudad de Paris... que bonito :)
Pero  una cosa es lo 
que se dice... y otra lo que se hace... Porque en el  último momento y 
para sorpresa de los parisinos, Eduard Ravel cambia el  testamento y se 
lo deja todo a... Su  enfermera!!
Evidentemente,
 esta decisión cayó como un  jarro de agua fría al resto de la familia 
Ravel que enseguida contrató  abogados para interponer un juicio y 
conseguir esos milloncejos de  francos musicales...
Mucho
 dinero en juego... y la justicia, como  siempre, muy lenta... Más de 
diez años de juicios, lo que hizo que la  propia enfermera Jeanne 
Tavernne muriera sin poder haber echado mano a  los beneficios que, por 
supuesto, seguía generando la música de Ravel,  pero que estaban 
inmovilizados por un tal Jean Jacques Lemoine, el director de la Sociedad de  Autores Francesa hasta que terminara el juicio...
Tras
 años de pruebas, deliberaciones y  apelaciones, el tribunal dicta 
sentencia y deja como único heredero de  una cantidad bastante 
importante de millones a... Alexandre Tavernne!!!,  el barbero 
reconvertido a Chofer, el marido de la enfermera que había  cuidado al 
hermano del compositor Maurice Ravel... Todo un culebrón...
Para  finalizar esta telenovela hay que decir que al poco tiempo, Jean
 Jacques Lemoine desapareció  "misteriosamente" de la SACEM y montó una 
nueva empresa, cuyo primer  cliente fue... tachán!!... Alexander 
Tavernne y la millonada que había  ganado en el juicio... jejeje... 
Fíate tú de las Sociedades de  Autores... jejeje.
Y aquí os incrusto este genial corto:
Jacques Villeret en "El tamborilero del bolero de Ravel"
Aquí el enlace a la web del podcast original:
http://podcast-irreductible.blogspot.com/2009/12/podcast-irreductible-30-el-bolero-de.html
Por Conde Chócula (Aresti)
 


 

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