Nom. Picudo Rojo (Rhynchophorus
ferrugineus)
Este
simpático ejemplar de escarabajo esconde tras esa colorida apariencia
una de las plagas más preocupantes para las palmeras de la Península,
llegando a alcanzar cifras tan alarmantes como la destrucción de unas
11.500 palmeras solo en la comunidad andaluza. Se ha convertido en un
secuaz anónimo de la crisis española provocando pérdidas que superan los
50 millones de euros en el litoral Valenciano. Por no mencionar las
pérdidas ambientales y culturales que puede provocar como la amenaza a
El Palmeral de Elche, Patrimonio de la Humanidad. El mayor miedo ahora
es que terminen atacando también al palmito, única especie autóctona de
palmera en Europa, al igual que ha hecho con la palmera canaria
autóctona.
Hemos convertido este precioso insecto en un odiado bichejo al traerlo a España como especie introducida ¿y quién o qué ha podido provocar esto?
Pues bien, los primeros picudos fueron introducidos con la importación de palmeras datileras (Phoenix dactylifera) procedentes de Egipto que habían sido enviadas a España como originarias de Yemen sin una adecuada inspección.
Los primeros casos aparecieron en la costa de Granada y Málaga en 1994, dicen las malas lenguas que pudo venir en alguna palmera que se introdujo por algún multimillonario en las grandes urbanizaciones de Marbella de forma no controlada.
En los últimos años la urbanización de la costa mediterránea ha provocado que con el ajardinamiento se introdujeran palmeras de terceros países plagadas de estos escarabajos dando lugar a múltiples focos y agravando más el problema, y es que al final todo lo barato sale caro.
Como en todas las grandes luchas para destruir al enemigo hay que estudiar como vive. En este caso los picudos tienen un ciclo de vida muy característico que les asegura su supervivencia. Las hembras hacen numerosas puestas en la corona de la palmera, de los huevos salen las larvas, las cuales se alimentan del interior de la palmera labrando galerías de hasta más de 1 metro de profundidad. Más tarde formarán un capullo con fibras de la propia palmera del que saldrá nuevamente un adulto que volará a la palmera más cercana y comenzará un nuevo ciclo.
Hemos convertido este precioso insecto en un odiado bichejo al traerlo a España como especie introducida ¿y quién o qué ha podido provocar esto?
Pues bien, los primeros picudos fueron introducidos con la importación de palmeras datileras (Phoenix dactylifera) procedentes de Egipto que habían sido enviadas a España como originarias de Yemen sin una adecuada inspección.
Los primeros casos aparecieron en la costa de Granada y Málaga en 1994, dicen las malas lenguas que pudo venir en alguna palmera que se introdujo por algún multimillonario en las grandes urbanizaciones de Marbella de forma no controlada.
En los últimos años la urbanización de la costa mediterránea ha provocado que con el ajardinamiento se introdujeran palmeras de terceros países plagadas de estos escarabajos dando lugar a múltiples focos y agravando más el problema, y es que al final todo lo barato sale caro.
Como en todas las grandes luchas para destruir al enemigo hay que estudiar como vive. En este caso los picudos tienen un ciclo de vida muy característico que les asegura su supervivencia. Las hembras hacen numerosas puestas en la corona de la palmera, de los huevos salen las larvas, las cuales se alimentan del interior de la palmera labrando galerías de hasta más de 1 metro de profundidad. Más tarde formarán un capullo con fibras de la propia palmera del que saldrá nuevamente un adulto que volará a la palmera más cercana y comenzará un nuevo ciclo.
El resultado: una palmera muerta, hueca por dentro, que se seca poco a poco hasta resquebrajarse.
¿Cómo acabar con él entonces?
Al
no tener depredadores naturales está siendo tarea imposible acabar con
la plaga; y es que introducir a sus depredadores comunes crearía un mal mayor. La pescadilla que se muerde la cola.
Hasta el momento ningún intento está dando resultado, además de ser muy difíciles de detectar puesto que actúan desde el interior, una vez formado el capullo ningún insecticida es capaz de penetrar. Otro problema es que los daños visibles se hacen notables demasiado tarde, las palmas empiezan a caer cuando la palmera está prácticamente muerta.
El método más utilizado y eficaz son las inyecciones de productos tóxicos directamente en el tronco para acabar con las larvas.
Hasta el momento ningún intento está dando resultado, además de ser muy difíciles de detectar puesto que actúan desde el interior, una vez formado el capullo ningún insecticida es capaz de penetrar. Otro problema es que los daños visibles se hacen notables demasiado tarde, las palmas empiezan a caer cuando la palmera está prácticamente muerta.
El método más utilizado y eficaz son las inyecciones de productos tóxicos directamente en el tronco para acabar con las larvas.
La Universidad de
Alicante ha creado un tratamiento contra el picudo consistente en la
utilización de un hongo parásito (Beauveria bassiana) que solo ataca al
animal, no afectando a la palmera ni otras especies indiscriminadamente,
y además no representa un riesgo para las personas. Esto consiste en
pulverizar un tipo de hongo microscópico que al ponerse en contacto con
el insecto lo utiliza como alimento proliferando sobre él y formando una
colonia blanquecina.
Sin embargo además de tomar todas las
precauciones posibles y llevar un control sobre ella, si está muy
afectada lo más efectivo es talarla y quemarla. Aunque suene drástico,
conseguiréis eliminar el foco al completo y parar la expansión.
¡Ojo! Las apariencias no lo son todo, si encuentran uno de estos bichejos adorables no le dejen marchar.
¡Ojo! Las apariencias no lo son todo, si encuentran uno de estos bichejos adorables no le dejen marchar.
Fuentes:
Biología y Dinámica de
población de Picudo Rojo de la Plamera, Rhynchophorus ferrugineus (Olivier,1790)
(Coleoptera:Dryophthoridae) en España
Tomás Cabello
Universidad de Almería.Escuela Politécnica superior. Dpto. Biología aplicada.
Tomás Cabello
Universidad de Almería.Escuela Politécnica superior. Dpto. Biología aplicada.
Información del autor:
Artículo escrito por Leyla Gil, estudiante del grado en Biología por la universidad de Murcia, para la sección de Ciencia y Biología de Mente Enjambre.
Proviene de un pequeño pueblecito de labriegos y ganaderos murcianos, lo cual no le ha impedido formarse como una persona honrada y hablar un castellano inteligible. Entre las aptitudes que ofrece su padre para casarla están el saber hacer caballones, arar la tierra y jugar al guitar hero. Tiene réplica para todo; ferviente en las discusiones, no dudará en gritarte si está de acuerdo contigo o si quiere sacarte los ojos.
Tranquilos, el rifle solo lo usa para matar ratas.
¿Un metro de profundidad? Malditos bastardos.
ResponderEliminarHace un tiempo en la ciudad de Murcia casi se cargan a una mujer que iba paseando con su bebe, que no le avía la palmera al desquebrajarse de puro milagro. Simpáticos bichos.
Son horribles, no te imaginas las mandíbulas que tienen las larvas, dan bastante yuyu XD (Pobre señora)
ResponderEliminarYo creo que esto es un castigo divino, además dices que vienen de Egipto, con lo cual estamos ante el inicio de las "siete plagas de España", que afectarán sobremanera a nuestro dios el faraón Mariano Rajoy, y a sus hamijos esclavistas.
ResponderEliminarPues yo ando jodido, que soy el primogénito.
EliminarVoy a hacerte trabajar un poco, señora Leyla, ¿y si vemos uno que hacemos a parte de matarlo? ¿avisamos a algún sitio?
ResponderEliminarPues el protocolo de control esta siendo ejecutado por la empresa TRAGSA bajo la
Eliminarsupervisión del Servicio de Sanidad Vegetal.
TELEFONOS DE INTERES:
Servicio de Sanidad Vegetal: 968 36 54 39
Esteban Abad Salcedo 619 73 57 23
Francisco José González Zapater 690 90 64 41
Fax 968 36 27 25
Yo tengo una solucción: Un buen hormiguero cerca.
ResponderEliminarEstuve viendo varios días una gran fila de hormigas que subía a mis palmeras. Cuando me acerqué vi que estaban bajando montones de larvas. Mis palmeras aun siguen en pie asi que igual la cosa funcionó.
En principio puede ser una buena idea, pero no creo que funcione con este tipo de larvas (son demasiado grandes para las hormigas).
EliminarOtra idea: AGUA, AGUA, AGUA... A veces lo mas fácil es lo mas eficaz.
ResponderEliminarYo lo hice con una que estaba prácticamente muerta y un buen día me sorprendió una "hoja" saliendo del desastre como el ave Fénix.
La palmera puede sobrevivir mientras las larvas no lleguen a la medula del tronco. El problema es que creamos que esta solucionado y siga siendo una guarida perfecta para este insecto, sed cuidadosos.
ResponderEliminarGracias por la explicación.
ResponderEliminarUn detallito más. Nada de podar las palmeras pues su "sangre" es lo que más atrae a estos bichos. Caso de hacerlo, que sea en época invernal (y no en primavera/verano como se venía haciendo). Con el frío, el picudo queda inactivo.
Un saludo.